14 de noviembre de 2024

Hoy no hubo clase presencial, ya que estamos inmersos en la jornada de prácticas. El maestro, consciente de nuestra carga de trabajo, nos permitió realizar las actividades desde casa, con la única condición de subir al menos una tarea para registrar nuestra asistencia. Sin embargo, los últimos días han sido especialmente difíciles para todos.

El aniversario escolar ha implicado una serie de actividades adicionales, como el desfile y la coronación de las candidatas, que han demandado un gran esfuerzo físico y mental, además de consumir una gran cantidad de tiempo. Esto ha dificultado cumplir con otras responsabilidades, incluidas las actividades académicas asignadas.

Con el objetivo de avanzar en los preparativos, algunos compañeros y yo decidimos reunirnos en la escuela para elaborar el material necesario. Aunque inicialmente planeamos trabajar en equipo y repartirnos las tareas, no todos asistieron, lo que dejó a unos pocos asumiendo más responsabilidades de las esperadas. A pesar de ello, nos enfocamos en lo más urgente: completar los preparativos para el aniversario.

Durante esta jornada, ninguno de nosotros logró dedicar tiempo a subir la actividad solicitada por el maestro, aunque éramos conscientes de su importancia. El tiempo simplemente no fue suficiente. La situación se complicó aún más cuando el maestro pasó por la institución y nos vio en el salón de clases. Al percatarse de nuestra presencia, pidió a mi compañero Marco que redactara una lista con los nombres de quienes estábamos ahí. Esto nos tomó por sorpresa, ya que pensábamos que la asistencia no se registraría de esa forma.